NATURALEZA Y GEOGRAFÍA

La naturaleza nos ofrece toda la belleza, armonía, equilibrio y estímulos que cualquier ser humano necesita para su correcto desarrollo. Todas las texturas, colores y sensaciones que podamos imaginar están aquí, se nos ofrecen gratis y desinteresadamente, con toda la generosidad de la que siempre hace gala Ella, la Madre Naturaleza. Sencillamente es el lugar perfecto para estar si tienes mucho que aprender.

Desde lo puramente físico y motor, como escalar unas rocas o trepar un árbol, a lo más emocional, al ver como desde el bichín más pequeño hasta el animal más grande, tiene su sitio en la cadena de la vida y qué lugar ocupamos nosotros en esa cadena y en el universo.

Aprender respeto por toda esa maravilla, darle valor, darse cuenta del milagro que es y la suerte que tenemos de estar aquí rodeados de toda esta belleza y preservarla, es uno de los mayores y mejores aprendizajes que podemos dar a nuestros hijos.  A respetar a la hormiguita que está trabajando para construir su despensa para el invierno, a la flor que no quiere ser cortada, al ciervo que multiplica por mil la belleza de cualquier paisaje donde aparece.

Esta interacción con lo natural siempre es favorable y positiva y la podemos hacer en la medida de nuestras posibilidades y circunstancias, desde el parque de al lado de casa, a incursiones en la naturaleza para conectar con la Tierra más profundamente, o incluso desde casa con materiales adecuados. El juego en la Naturaleza cobra una dimensión casi cósmica en el desarrollo de los niños y debemos darles la posibilidad de descubrir todo lo que se les ofrece y qué son capaces de hacer.